domingo, 21 de septiembre de 2008

Madonna

Sin palabras. Solo hay una manera para saber como fue el conciertazo de Madonna: estando allí.

Apenas pude dormir la noche anterior, y el mismo día del concierto aún pensaba que era imposible. Nos quedaba un largo camino para mi y Salva para llegar hasta ella, pasando por San Javier para recoger a mi hermana, y por Alicante a por nuestro amigo Yair. A última hora se apuntó al viaje Antonio, mi DJ particular, jejejeje.

Mucho Hard Candy y pocos recuerdos al pasado, aunque nos hizo vibrar y llorar con las canciones con las que mi hermana y yo nos criamos allá por los Estados Unidos: Borderline, Into The Groove, La Isla Bonita (aunque no me gustó nada cómo la cantó), Voguey Like a Prayer (sin duda, la mejor de la noche).

Like a Prayer nos hizo saltar, chillar, llorar... y se lo curró de puta madre!


De la Madonna postaño 2000 solo nos dejó una muestra. Del "Ray of Ligth" nos dejó su segundo sencillo: Ray Of Light y del "Confessions on a dance floor" bailamos con Hung up (tan parodiada por La Terremoto de Alcorcón).

Del disco nuevo, lógicamente, la mayoría de las canciones. Destaco 4 minutes, She's not me (genial, las bailarinas estaban quietas como maniquies por medio del escenario con las ropas de los antiguos looks de Madonna y les arrancaba piezas), Miles away, Give it to me y Get stupid, con un video alucinante:


El concierto empezó incluso 5 minutos antes de las 22h. (que es cuando empezaba realmente) y terminó justo antes de las 12 de la noche para así continuar con la filosofía de la cábala que sigue. Fueron casi dos horas que no olvidaré nunca.


Lamentablemente, el final de la noche no fue tan espectacular como el propio concierto. La organización de la salida del Circuito de Cheste fueron simplemente lamentables y vergonzosos. El circuito estaba preparado para que hubieran 50.000 personas dentro, pero no para que pudieran salir de allí.
Nosotros fuimos en coche hasta Cheste y allí habilitaron en los polígonos industriales de las afueras diversos zonas de parking para evitar que fueras hasta el mismo circuito en el coche. Llegar hasta ahí y aparcar fue muy sencillo. Hasta ahí todo medianamente bien.

La salida... mejor olvidarla. La zona para pillar el bus era un recinto de polvo y tierra donde corríamos de un sitio a otro sin saber dónde ir. Los autobuses abrian sus puertas en medio del campo y allí la peña corría y corría como locos para entrar por la puerta efecto embudo. Mientras, unos cuantos miles de personas hacíamos cola donde se supone que se tenía que hacer para subir al bus, pero allí no llegaban los autobuses; es más, los de la organización no sabían que estabamos haciendo cola allí: simplemente se habían olvidado de nosotros. Aunque bueno, nada que no se arreglara con unas cuantas amenazas a los de organización y otras tácticas que no describiré aquí... Si al final subimos a un bus será porque Salva supo reaccionar, que sino seguro que seguiré por allí buscando cómo ir al coche!

Ante todo este paronama destaco la completa ausencia de seguridad. No vi un solo policía ni nadie de seguridad dentro ni fuera del concierto, y mucho menos donde los parking y donde coger el autobus. Recordando, tampoco vi a nadie de Protección Civil, Cruz Roja ni ningun otro cuerpo de auxilio... vamos, que si nos pasa algo allí dentro si no nos rescata Madonna in person, pues vamos listos!


Aunque no voy a dejar que cuatro malnacidos desorganizados que estropeen todo lo bueno de esa noche... fue genial, y sin duda pienso repetir!

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