Después de 15 años, la Federación Murciana de Asociaciones de Estudiantes FEMAE se ve refrendada por el Tribunal Supremo de Justicia. En los más de 15 años que tiene nuestra organización venimos reivindicando la necesidad de una asignatura que nos Eduque en la Participación. Una asignatura que nos enseñe a ser ciudadanos activos, conocer nuestros derechos, la forma que tenemos de relacionarnos con la administración; y cuáles son nuestros canales de participación. Porque eso no se consigue con la transversalización, y porque nuestra sociedad necesita ser educada en el respeto de sí misma.
España es una democracia muy joven que aún está aprendiendo a caminar y que aún se está analizando a sí misma. Pero, esos valores constitucionales de igualdad, respeto y participación activa en el desarrollo político, económico, social y cultural necesitan de una verdadera implicación y sólo se pueden hacer efectivos a través de su conocimiento y su práctica diaria.
La transversalización de la LOGSE fue un fracaso. Tras más de diez años el propio Sistema Educativo tuvo que reconocer que no ha sabido educar en valores. El profesorado no lograba visualizar en sus currículos los objetivos transversales y no había un área específica que se encargara de su coordinación y tampoco se invirtió en la formación del mismo profesorado. Por eso, con el debate de la LOE, se hacía indispensable reconocer los errores y corregirlos con una asignatura específica.
Sin embargo, desde la Federación Murciana de Asociaciones de Estudiantes FEMAE queremos denunciar que el Real Decreto del Ministerio de Educación se ha quedado a medio camino. Echamos en falta más contenidos respecto a la Participación Estudiantil, que consideramos imprescindible. Educación para la Ciudadanía es una oportunidad para que la Escuela abra sus puertas a la Sociedad y que las diversas Plataformas ciudadanas (ONGs, Asociaciones de Estudiantes, etc.) puedan fomentar la participación y valores como la solidaridad, la igualdad entre otros.
Desde FEMAE lamentamos el maltrato que ha sufrido esta asignatura tanto por parte de muchas administraciones autonómicas como por agentes sociales que la han utilizado para hacer oposición, partidismo y crítica al gobierno, así como olvidarse de la necesidad de Educar en Valores de respeto a la diferencia, el respeto de los Derechos Humanos y el conocimiento de nuestra Democracia. Estos aspectos, no pueden ser moneda de cambio para hacer política. Son los cimientos básicos para la construcción de nuestra sociedad, el avance hacia una sociedad democrática, participativa y que convive en el respeto de la normas y en el respeto de sus integrantes.
Por eso, para nosotros y nosotras nunca ha cabido la “Objeción de Conciencia”. Solicitar la objeción de conciencia a la asignatura de Educación Para la Ciudadanía es comparable con la disparidad de solicitar la objeción a la asignatura de Ciencias Naturales porque los padres no crean en la teoría de la evolución sino en el creacionismo. Nuestro Sistema Educativo no puede ofrecer “educación a la carta”, donde los padres puedan decidir qué asignaturas van a estudiar sus hijos. Hay un mínimo común ético igualitario para todos y no se pueden hacer distinciones en los valores que son comunes a toda la sociedad.
Finalmente, nos congratulamos de la decisión de Tribunal Supremo de Justicia, porque pone de manifiesto lo que nosotros y nosotras siempre hemos reivindicado. No obstante, hacemos un llamamiento a la corresponsabilidad de los partidos políticos y los agentes sociales para propiciar un Pacto de Estado en materia de Educación para que no se vuelvan a dar situaciones como ésta y este proceso no se demore con las deliberaciones del Tribunal Constitucional. Así mismo pedimos que no se olviden que detrás de estas decisiones hay alumnos y alumnas, implicados y afectados finales de todas ellas.
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